jueves, 2 de abril de 2009

Derrota cantada


Sin pena ni gloria la selección peruana de fútbol cayó 3-0 ante su similar de Brasil en el estadio Beira Río de Porto Alegre. Como era de esperarse Brasil fue un claro dominador desde el comienzo, ya que a los 4 minutos un escurridizo Luis Fabiano penetra área peruana y bate al pórtico peruano, pero el juez de línea marca fuera de juego, un susto, pero Brasil ya revelaba lo que se vendría más adelante.
Brasil venía jugando a ritmo de entrenamiento con Perú, los garotos se paseaban y manejaban a su antojo las acciones del encuentro hasta que una falta infantil de Zambrano contra Kaká provoca un penal, que es bien ejecutado por Luis Fabiano pese a que Butrón se lanzó al lado correcto, pero lamentablemente no alcanzó. Una vez más se vio reflejada la ineptitud e inocencia de los jugadores peruanos, pero es esa misma ineptitud e inocencia que se ha venido demostrando a lo largo de todo este proceso eliminatorio, quizá por eso no sorprendía mucho el resultado que se veía venir.
Perú nunca tuvo indicios de reaccionar, es así que nuevamente a los 27´ Luis Fabiano le gana las espaldas a Zambrano y Rodríguez quedando mano a mano con Butrón y colocando el balón a lado derecho del arquero poniendo así un claro 2-0 a favor de los locales, terminando el primer tiempo con un Perú confundido.

El segundo tiempo no fue diferente al primero, ya que Brasil seguía dominando el encuentro a vista y paciencia de 40 mil hinchas que pedían más goles. Los brasileños tratando de satisfacer el pedido de la afición marcan el tercer gol, hecho por Melo, compañero de Juan Vargas en la Fiorentina de Italia, tras una jugada fuerte ya que pasó sin problema alguno a los volantes y defensas peruanos, pero colocando el esférico al primer palo del arquero dejando sin reacción a Butrón.
Ya con un claro 3-0 Brasil bajó las pocas revoluciones que le puso al encuentro, hasta que en el minuto 66 el jugador de la San Martín Alexander Sanchéz saca un fierro haciendo que el golero brasileño Julio Cesar se estire en demasía provocando que el disparo choque en el palo.
Minutos más tarde todo el estadio pedía a gritos a Alexander Pato, estrella del Milán y compañero de Kaká en el club italiano. El cambio se realizo por Robinho que había aparecido poco en el partido, minutos después entra un pifiado Ronaldinho por Elano, pero no hubo más goles, el marcador para felicidad nuestra no se ampliaría más.
Una nueva derrota, una nueva decepción que nos deja ahora sí lejos y fuera del mundial.
Daniel La Rosa Ramirez

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